Madrid amaneció fría y lluviosa, intensamente emocionada por nuestra partida. Qué gracia, los hermanos se lo toman a broma, pero una vez más constato la evidencia: En Madrid siempre llueve.
Metro hasta la T4 de Barajas, facturamos las maletas con tiempo suficiente y nos invitan a pasar a la sala vip de Iberia. Por suerte nos habían ofrecido una promoción de Iberia Plus, pasando de clase turista a business, por 1500 puntos del programa que habíamos conseguido con viajes anteriores. Fantástico. Os voy a presentar como se vive en esa sala:
Ahí está nuestro vuelo. Pero no tienes que preocuparte, te avisan en el momento en que puedes embarcar sin demoras |
En el momento de embarcar, ya en el túnel de acceso al avión había una mujer encargada de calibrar los equipajes de mano, si alguno superaba las medidas permitidas debía etiquetarlo y echarlo por una tronera para que viajara en bodega. El primero de los viajeros llevaba un auténtico maletón y se resistía a que lo echaran a la bodega, los pasajeros nos íbamos atropando en el túnel, empezaban las protestas y la presión se iba haciendo más y más dura. La pobre señora no podía contener la avalancha, gritaba, apelaba a la normativa, ella sólo cumplía con su trabajo. Pero la batalla estaba perdida. En un regate, nosotros -dignos business- por la derecha, el protestante por la izquierda que se coló con su maleta y todos los demás detrás en tropel. Creo que la buena mujer debió preferir tirarse ella misma por la tronera antes que resultar arrollada por más de trescientos pasajeros impacientes bien y voluminosamente pertrechados.
Los efectos de la huelga de controladores aún se hicieron sentir, una vez embarcados tardaríamos una hora en despegar. Había caravana de aviones para tomar la salida. Hasta nueve seguidos llegamos a contar.
Una de mis encantadoras compañeras de trabajo, Aurora, está interesada en los pequeños detalles colaterales de este viaje, detalles de comidas y precios, me dijo casi al despedirme. Pues bien, aquí os cuento el menú de primera clase en Iberia:
LOS ENTRANTES
Pan caliente y aceite de oliva extra orgánico
Plato de quesos españoles con uvas
Consomé de ternera
Vieira marinada con ensalada fresca y calabacín baby
LOS PLATOS PRINCIPALES
Pollo de corral con sanfaina o
Salmón a la plancha con crema de guisantes y patatas al horno con anchoas o
Fusilli con salteado de setas y jamón ibérico, espárragos verdes y jugo de carne
LOS POSTRES
Mousse de turrón de Jijona de Paco Torreblanca o
Helado de fresa con nata
Café, infusiones y licores
En la carta de vinos nos daban a elegir entre un Penedés reserva, un Rioja reserva y un Rivera del Duero crianza, optamos por el Rioja Conde de Valdemar, reserva de 2004. Lamentablemente, el sobrecargo vino a informarnos de que justamente el plato de salmón que ambos habíamos elegido se les había agotado, ¿agotado?, ¿cuándo?, en fin, ante tantas cosas apetitosas, decidimos pedirlo todo, eligiendo cada uno un plato diferente.
Los entrantes muy ricos, bien regados con aceite; el pollo un poquito seco pero sabroso con una salsa de pimientos; el salteado de setas me pareció un poco soso pero a Luz le gustó más que el pollo; la mousse de turrón deliciosa, como para repetir dos veces; y para terminar un Málaga y un Jerez dulce denso como jarabe. Buenazo que se dice en Piura.
¿El precio de todo ello?, el mismo que el del desayuno en la sala vip de Iberia: Cero euritos.
A pesar de todo son doce horas de viaje y termina haciendose pesado. Se agotó la batería del ordenador, me hice todos los sudokus, vimos dos películas, dormimos y volvimos a dormir desde la comida hasta la merienda.
Hora de la siesta |
A pesar de todo son doce horas de viaje y termina haciendose pesado. Se agotó la batería del ordenador, me hice todos los sudokus, vimos dos películas, dormimos y volvimos a dormir desde la comida hasta la merienda.
Pero todo llega y fue emocionante comenzar a descender sobre Lima. El avión sobrevuela la ciudad y se pasa tres pueblos sobre el mar, virando a estribor, nuestra banda, mostrando su trazado urbano con millones de puntos de luz anaranjada, entre los que van apareciendo cuadras (manzanas), calles, pistas (carreteras), carros (automóviles) y personas.
Son las 19:30, hora local y la temperatura ambiente es de 18 grados centígrados. Ya estamos en Lima.
La merienda |
Pero todo llega y fue emocionante comenzar a descender sobre Lima. El avión sobrevuela la ciudad y se pasa tres pueblos sobre el mar, virando a estribor, nuestra banda, mostrando su trazado urbano con millones de puntos de luz anaranjada, entre los que van apareciendo cuadras (manzanas), calles, pistas (carreteras), carros (automóviles) y personas.
Son las 19:30, hora local y la temperatura ambiente es de 18 grados centígrados. Ya estamos en Lima.
Lima, por fin. Cuanto tiempo sin verte |
Puedes ver más fotos de este día en:
http://picasaweb.google.com/CerecedaAtarama/06?authkey=Gv1sRgCIbendKW6fiPjgE#